El padre Marcos Martínez Lerena nació en Baños de Río Tobia (La Rioja), el 3 de septiembre de 1931, hijo de Lino y Sofía, de una familia de tres hermanos; Sofía, Orieta y Lino, ingresa en el Seminario a finales de la década de los cuarenta y es ordenado sacerdote el 4 de junio de 1955.
El pasado mes había cumplido 65 años de sacerdote. Desde entonces ha tenido una vida muy intensa, llevando a cabo una obra enorme, especialmente en su último destino, que fue en la Cañada de Urdaneta (Venezuela), donde llegó en diciembre de 1968, fue el párroco de la principal iglesia del municipio “La Inmaculada Concepción”. Su despedida masiva y popular, a pesar de la situación en que se encuentra los países en estos momentos, demostró lo querido que era entre la comunidad de aquellas tierras. La forma de ser del padre Marcos quedó definida en una frase que dijo, el mismo, al celebrar el 50 aniversario como pastor de dicha parroquia “Solo he sido un siervo inútil, que ha hecho lo que tenía que hacer”.
D.E.P.